La vida útil de los audífonos puede ser larga, oscilando entre los cinco o diez años dependiendo del tipo de dispositivo y del mantenimiento que le facilite el usuario. Factores como el material del que están hechos los audífonos, su formato, dónde se guardan, dónde se usan y la frecuencia y modo de limpiarlos, influyen directamente en su funcionamiento y duración.
Otro factor, no menos importante, es la fisiología de la persona usuaria de audífonos, ya que fluidos corporales como el sudor, el cerumen e incluso la piel muy grasa, pueden afectar a los componentes de plástico o metal que componen el audífono.
Si bien la persona que usa audífonos debe darles cuidados y mantenimiento durante todo el año, con la llegada de los meses más cálidos hay que extremar algunas precauciones. Las altas temperaturas, el sudor, o el agua del mar o las piscinas, son riesgos externos que se incrementan con la llegada del verano.
Vamos a dar un repaso a los principales cuidados que necesitan los audífonos durante todo el año y las medidas concretas cuando llega el verano.
El mantenimiento diario y otros consejos
Los audífonos se convierten en unos grandes compañeros del día a día para la persona que los usa, por lo que merece la pena dedicarles unos minutos de atención cada día, bien sea para su limpieza o para prevenir que se dañen. Lo cuidados a tener en cuenta a diario son:
- Limpiar los audífonos con un paño suave, un pañuelo de papel o las herramientas de limpieza adecuadas para eliminar la cera, la grasa y la humedad del oído. En caso de duda sobre dichas herramientas, consultar con uno de los audioprotesistas de Audiotek. Abstenerse de utilizar agua ni ningún tipo de disolvente.
- Quitarse los audífonos antes de aplicarse cosméticos como cremas, lociones para después del afeitado, perfumes, o spray para el cabello, ya que pueden penetrar en los audífonos y dañarlos.
- Al quitarse los audífonos, guardarlos en un lugar seco con el portapilas abierto para facilitar la conservación de la pila.
Otros consejos a tener en cuenta:
- Contactar con Audiotek cuando los audífonos empiezan a decolorarse o se vuelvan rígidos y quebradizos.
- Para limpiar el tubo y el acoplador del auricular, emplear un paño húmedo, evitando siempre el uso directo del agua.
- No utilizar los audífonos estando en el agua, como por ejemplo en la ducha, en la piscina o en el mar. La lluvia intensa y las saunas o baños de vapor, también perjudican los audífonos.
- Procurar mantener los audífonos limpios y secos. Cuando estén húmedos, dejar que se sequen habiendo sacado la pila y con el portapilas abierto.
- Alejar los audífonos de las fuentes de calor y la luz solar directa.
- Colocar por la noche el audífono y la pila en un estuche o recipiente sellado, para que se seque totalmente hasta el momento de usarlos al día siguiente.
- Leer detalladamente las instrucciones de uso de los audífonos y contactar con los audioprotesistas de Audiotek para pedir indicaciones adicionales o resolver cualquier duda.
¿Y en verano, qué más hay que hacer?
Uno de los principales enemigos de los audífonos es la humedad, tanto la del ambiente como la provocada por la transpiración consecuencia del calor. Por lo tanto, antes de colocarse los dispositivos, conviene asegurarse de que los oídos estén bien secos. Durante la noche se puede sacar la batería y, si disponemos de un deshumidificador para evitar el exceso de humedad en casa, será una ayuda.
Llegado el momento de disfrutar de la playa o piscina, tener en cuenta dos cosas. La primera de ellas es que no hay que exponer el audífono a una fuente de calor directa como puede ser el sol. Por lo tanto, si se lleva el audífono puesto en la playa, colocarse bajo la sombrilla o llevar un sombrero que proteja el dispositivo de los rayos solares. Y a la hora de darse un baño, antes de lanzarse al agua hay que quitarse los audífonos y guardarlos en su estuche específico, que deberá estar protegido de la exposición directa al sol.
Pero en verano no todo es playa o piscina y el senderismo o rutas por la montaña, son otras opciones escogidas por muchas personas. En estos casos procurar llevar siempre consigo el estuche de los audífonos, y en aquellos tramos que resulten polvorientos, guardarlos. El polvo también perjudica estos dispositivos, y abunda más en el ambiente durante el verano debido a la escasez de lluvia.
Otro detalle a tener en cuenta si estamos en la playa o de excursión y queremos aplicarnos protección solar en el rostro, es quitarnos antes los audífonos. Y será útil disponer siempre pañuelos de papel, para en un momento dado secar el interior de los oídos si sospechamos que se está acumulado humedad.
En realidad, se trata de un conjunto de medidas sencillas basadas en el sentido común, que no interfieren en el disfrute de la persona. Todo lo contrario: tendrá la tranquilidad de estar cuidando correctamente sus audífonos, ayudando a que le duren más tiempo.